Cada día resuena con más fuerza la posible huelga indefinida en los catorce puertos de la costa oeste de Estados Unidos a partir del 1 de octubre. Hasta la fecha, los delegados sindicales de la Asociación Internacional de Estibadores (ILA, por sus siglas en inglés) apoyan unánimemente convocarla si no se alcanza un nuevo acuerdo laboral que afecta a 25.000 trabajadores portuarios.
Los puertos de la costa oeste mueven 550.000 TEUs a la semana de manera que la movilización podría afectar a un 1,7% de la flota global de contenedores. Asimismo una posible huelga indefinida podría ralentizar el movimiento de hasta 4,5 millones de TEUs en todo el mundo, según algunos analistas.
Stock Logistic, como operador logístico internacional con capacidad para realizar operaciones marítimas por todo el mundo, sigue de cerca este conflicto. El grave impacto que podría tener la huelga en las operaciones, así como en el conjunto de la cadena de suministro, es relevante. No solo afectaría al flujo de mercancías a nivel mundial, sino que también podría generar demoras en entregas, el aumento de costes logísticos y la necesidad de ajustar rutas o buscar alternativas menos eficientes.
La automatización, una de las causas del conflicto
Según el sindicato ILA, la negativa a la automatización de los puertos y el aumento salarial son las principales causas de esta convocatoria de huelga. Los trabajadores, según estas mismas fuentes, están preocupados por la pérdida de empleos y la precarización de las condiciones laborales. Además, se muestran en contra de los contratos portuarios exclusivos que favorecen a ciertas compañías, una medida que, según ellos, afecta negativamente la competencia laboral.
Los factores geopolíticos clave
Ante esta situación, casi 180 asociaciones empresarias y comerciales han solicitado al presidente de Estados Unidos Joe Biden que intervenga de manera “inmediata” para mediar en el conflicto. Esta posible huelga se da a semanas de las elecciones en los Estados Unidos, –previstas para el 5 de noviembre-, en el inicio de la Semana Dorada de China y a casi un año del inicio del conflicto en Medio Oriente que ha provocado interrupciones en el Canal de Suez como ruta marítima clave de conexión entre el Lejano Oriente, Europa y Estados Unidos. Factores muy relevantes que afectan a las disrupciones en el conjunto de la cadena de suministro.