El trincaje en el sector del transporte

El trincaje se conoce como la acción necesaria de sujetar, inmovilizando firmemente mediante los materiales o elementos requeridos, contenedores, cajas, palets, maquinaria y, en general, todo tipo de mercancías que sean transportadas con medios marítimos, terrestres o aéreos.

La finalidad del trincaje es prevenir y evitar posibles daños por golpes, rozaduras, desplazamientos o vuelcos en su contenido o en el medio de transporte, por lo que, además, mejora la seguridad durante el proceso de transporte. Una mala colocación de una mercancía puede ocasionar golpes, desplazamientos o vuelcos produciendo daños e incluso accidentes con riesgo para las personas y el medio ambiente.

En Stock Logistics llevamos más de 30 años dedicándonos a la logística y ofrecemos soluciones a medida adaptadas a las características particulares de cada sector industrial. De esta manera, por norma general, toda operación de carga o estiba en un medio de transporte (buque, camión o avión) siempre tiene que ir unida a la de trincaje, excepto cuando la característica de la carga o del medio de transporte facilite una total ocupación del espacio y no permita que queden huecos libres. Este supuesto tan sólo se produce ocasionalmente, de ahí la necesidad de las operaciones de este tipo como un complemento necesario a una operación logística.

Estudio de la carga

Para efectuar un trincaje correctamente es imprescindible realizar un estudio de la carga o mercancía a inmovilizar, saber el lugar donde se inmovilizara, el tipo de transporte que se va a realizar (marítimo, terrestre…) y cuál es la normativa a aplicar. Los principales factores que hay que tener en cuenta para definir el tipo de sujeción son:

  • Las dimensiones de la carga.
  • Los valores de aceleración.
  • El ángulo de amarre.
  • Los factores de fricción.

Tipos de trincaje

Según explican algunos expertos los principales tipos son:

  • Aquellos que ofrecen soluciones a medida y cubren las necesidades de transporte globales, tanto si se trata de cargas dinámicas –por ejemplo del ámbito náutico-, productos químicos peligrosos o artefactos frágiles.
  • Trincajes que se basan en flejes flexibles no metálicos. Existen con una amplia gama de anchuras y resistencias.
  • Sistemas de trincaje textiles que usan cintas tejidas de poliéster.

Seguro del transporte

Además de la importancia que este proceso tiene para que las mercancías lleguen correctamente a destino, hay que saber que el seguro del transporte -y las normativas vigentes a nivel aéreo, terrestre y marítimo- reflejan, entre otros motivos, que se puede rechazar un siniestro o no admitir mercancías en tránsito por falta de trincaje o insuficiencia del mismo.

Por otro lado, es el cargador quién tiene la responsabilidad de estibar y sujetar adecuadamente la carga, salvo que dichas operaciones hayan sido expresamente contratadas al operador logístico. También el cargador debe preparar las mercancías en envases y embalajes adecuados para el modo de transporte y el medio de transporte que se vayan a utilizar. Precisamente, este punto, el embalaje, es otro de los aspectos clave para que una mercancía llegue intacta a su destino.